En la noche de ayer SpaceX efectuó con éxito su misión CRS-17 tras varios retrasos, que consistía en lanzar una cápsula Dragon con suministros para la Estación Espacial Internacional (EEI). Si bien este tipo de misión era algo rutinario para la compañía y no entrañaba ningún tipo de riesgo, se puso una gran atención en este lanzamiento después de que la capsula Crew Dragon terminara completamente destruida en la última misión.
Eso sí, hay una gran diferencia entre ambas: la Crew Dragon está diseñada para llevar a nuevos astronautas al espacio, mientras que la Dragon normal está diseñada para llevar suministros.
De esta forma, en la noche de ayer SpaceX completó con éxito su misión, donde llevaron nada menos que más de 2.500 kilos de equipamiento y provisiones para los astronautas. Con este son ya 17 de los 20 lanzamientos de la compañía contratados por la NASA. Como era de esperar, la misión fue doblemente exitosa, ya que el cohete principal, el Falcon 9, consiguió volver a Tierra y aterrizar sin problema alguno sobre la barcaza para usarse en un nuevo lanzamiento.