Un joven japonés ha inventado un curioso casco parecido al de una bicicleta que en realidad es un dispositivo para guiar a la gente mediante un joystick.
El sistema utilizado para que alguien sea controlado es muy sencillo: el casco se dedica a dar pequeños tirones de orejas a aquella persona que lo lleve y se preste al experimento. De esta forma, el sujeto sabe cuando y hacia donde puede moverse.
Sin embargo, este nuevo invento podría tener una utilidad más seria: servir como dispositivo para ayudar a invidentes. En toco caso, el casco de momento tiene que ser controlado por una mano humana, aunque en el futuro podría ser mejorado con sensores de proximidad o conexión GPS para ser autónomo