La tienda online de regalos originales
Está claro que cuando se trata de emprender lo primero que hace falta es una idea, que por lo general deberá ser innovadora, disruptiva y proporcionará soluciones a los problemas que ya existen. En resumen, el pilar sobre el que se sustente la nueva empresa. Pero este primer requisito es para muchos lo más difícil de encontrar, bien sea porque todas esas ideas brillantes que nos vienen a la cabeza resulta que ya se le han ocurrido a alguien, o por el contrario porque consideramos que nuestras ideas en ningún caso podrían transformarse en un negocio de éxito.
Pero el caso es que lo que donde unos ven una idea que pudiera no llevar a ningún sitio otros en cambio son capaces de ver el éxito más rotundo. Algo parecido a esto es lo que les sucedió a los fundadores de Mr. Wonderful. Un matrimonio de diseñadores gráficos, que en medio de la locura que supone organizar una boda, y más aún si es la propia, decidieron que serían ellos mismos quienes diseñarían sus invitaciones, así como los pequeños regalos para los invitados, y es que realmente había una pequeñísima oferta de productos de este tipo y que fuesen verdaderamente originales.
El caso es que tuvieron tanto éxito entre sus amigos que estos comenzaron a hacerles encargos que Javi Aracil y Angi Cabal, los creadores de Mr. Wonderful, llevaban a cabo en sus ratos libres, pero siempre compaginándolos con sus respectivos trabajos. De esta forma fueron cogiendo popularidad en el mundillo de las bodas y los eventos, y gracias a sus apariciones en diferentes blogs no dejaron de llegar más y más pedidos. En este punto decidieron que era el momento de dedicarles todo su tiempo y crearon Mr. Wonderful, una empresa que se dedicaba a la producción y venta de merchandaising para bodas y eventos bajo pedido.
Pero de forma simultánea, en su propia web de Facebook iban subiendo frases y diseños alegres y motivadores, que inspiraban ‘buen rollismo’ a todo el que las veía. Y de la noche a la mañana se encontraron con que sus dibujos se habían vuelto virales por las redes sociales, y gente de todas partes, que ni siquiera conocían su estudio, comenzó a seguirles y darles likes en todas sus publicaciones. De tal forma que algo que comenzaron haciendo simplemente porque les gustaba, nada tenía que ver con su empresa de merchandaising, se fue convirtiendo poco a poco en su marca. Y como las casualidades nunca vienen solas, un buen día decidieron hacer un sorteo entre sus seguidores de una taza con uno de sus diseños impresos, participaron nada menos que 1.000 personas. Al poco tiempo esas mismas personas comenzaron a preguntarles donde podían comprar esa taza y fue en ese preciso momento cuando vieron la posibilidad de dejar de vender los productos que otros les pedían, y vender los suyos propios.
Así que decidieron ponerse manos a la obra, al cabo de unos meses se pusieron en marcha y desde el principio fue increíble. Comenzaron alquilando una plantilla de las plataformas online que te permiten crear tu negocio en la red en pocos pasos. Y rápidamente llego el éxito más inesperado, en un principio únicamente vendían a pequeñas tiendas pero al poco comenzaron a llegar los grandes clientes como el Corte Inglés, FNAC o Natura. Así en tan solo seis años de existencia han pasado de vender lo que otros les pedían a través de su estudio, lo fundaron en 2011, a hoy vender sus propios productos en nada menos que 26 países, a través de 1.200 puntos de venta diferentes. Todo ello desde una empresa que cuenta ya con 150 empleados y que ha facturado nada menos que 19 millones de euros en 2015 y 30 millones en 2016. Además todo ello sin endeudarse, ya en 2015 obtuvieron unos beneficios de 4,2 millones de euros.
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