Los países de la UE tienen ya más fácil crear documentos de identificación electrónicos más seguros y servicios de administración electrónica más sencillos y accesibles. Así se desprende de los resultados obtenidos por BioPass, el mayor proyecto europeo de investigación sobre tarjetas con chip. El objetivo de este proyecto ha sido desarrollar nuevos estándares y tecnologías para que los estados miembros sustituyan los sistemas actuales de comunicación entre el ciudadano y los estados por modernos sistemas electrónicos, y ahorrar así papel, tiempo y gastos de administración.
Las investigaciones se han centrado nuevos chips de seguridad, tecnologías de encriptación, nuevos sistemas operativos para tarjetas y aplicaciones de seguridad para ordenadores y dispositivos móviles. BioPass ha contado la financiación del Ministerio de Investigación y Educación de Alemania y del programa europeo EUREKA (dentro del proyecto CATRENE/MEDEA+), que han aportado la mitad de los 13 millones de euros del presupuesto. El resto ha llegado de los fondos de I+D de 11 empresas europeas.